¿Cuál es tu director o guionista preferido de cine? Tanto si es Steven Spielberg, Martin Scorsese, Pedro Almodóvar o Julio Medem, ¡no le vas a preguntar si le gusta elaborar discos DVD! Si lo hicieras, probablemente te respondería: «Escribo y dirijo películas. Los DVDs representan sólo una pequeña parte de la distribución».

Cuando me preguntan si mi programa CapicúaFM es una podifusión (hace poco, CapicúaFM sobrepasó 308 mil reproducciones en más de 160 países, según Podtrac), respondo: «Produzco programas de radio. Las podifusiones sólo representan una pequeña parte de la difusión». Eso es así, al considerar que no es una podifusión cuando se transmite en vivo/en directo ni tampoco cuando se escucha por la web. Por lo menos el 60% de los más de 308 mil veces que la gente ha escuchado CapicúaFM, ha sido directamente de la web, a pesar de haber alentado a los oyentes desde un principio para que se suscriban como una podifusión vía RSS. Por supuesto, mi programa CapicúaFM se redifunde en todas las plataformas importantes de podifusión, incluyendo Apple Podcasts, RadioPublic, Stitcher y TuneIn. Promociono esto verbalmente en el programa y en varios sitios web donde publico mi contenido. Sin embargo, según nuestras estadísticas, más del 60% de nuestros seguidores nos oyen en la web. Lo más importante es que escuchen, sigan escuchando y siga creciendo la cantidad de oyentes. Aprecio a todos los oyentes, tanto si nos oyen mediante una aplicación de podifusión en su aparato móvil o si simplemente tienen el hábito de oírnos en la web. Soy exigente sobre el uso de la terminología indicada para evitar malentendidos. La podifusión es una distribución muy importante, pero no es la única. No quiero menospreciar ninguna.

Aquí hay otra analogía: Pregúntale a tu autor preferido si le gusta redactar libros de tapa blanda. Probablemente te responderá: «Redacto manuscritos. Luego se distribuyen como libros electrónicos, de tapa blanda, dura… y hasta audiolibros».

La podifusión, los DVDs y los libros de tapa blanda no son palabrotas. Simplemente deberíamos utilizarlas debidamente para comunicarnos mejor 🙂

Dicho sea de paso, dentro de una frase o párrafo, el estilo establecido indica que los nombres de los programas de radio (como CapicúaFM y el tuyo) deberían escribirse en itálicas, igual que con los nombres de los libros, películas, periódicos, revistas y obras de teatro.

Me encanta la radio, ¡sobretodo la nueva radio! Consultor y autor de múltiples títulos

 

 

 

 

 

 

 

Allan Tépper
Consultor y autor de múltiples títulos